@Noudiari / Decidir cómo se evaluará la formación no presencial por el cierre de las aulas, valorar la posibilidad de volver a las aulas o determinar el fondo y forma de la EBAU serán algunos de los asuntos a debate mañana entre los ministerios de Educación y Universidades y las comunidades, mientras el mundo educativo pide que se ponga fin a la incertidumbre que rodea este fin de curso.
Según las previsiones, las perspectivas ante la finalización del curso 2019-2020 en el contexto de la situación sanitaria creada por la COVID-19 centrarán la reunión que la ministra de Educación, Isabel Celaá, y el de Universidades, Manuel Castells, mantendrán con los respectivos consejeros autonómicos.
Fue el pasado 25 de marzo, cuando Celaá se reunió por última vez con los responsables educativos de las comunidades en un encuentro en el que se decidió celebrar entre el 22 de junio y el 10 de julio la EBAU en su convocatoria ordinaria y antes del 10 de septiembre en la extraordinaria, así como cambiar su modelo y contenido para «no perjudicar a nadie», según explicó la ministra.
Celaá aseguró entonces que el 15 de abril se reuniría de nuevo por videoconferencia con los consejeros para determinar «las circunstancias» y «ver cómo transitamos el final del curso», sin que ningún alumno lo pierda por la pandemia.
Por su parte, Castells y los consejeros deberán definir cómo se va a terminar el curso -la mayoría de las universidades ya han comunicado que se hará de forma no presencial-, así cómo el método de evaluación de los estudiantes si no se vuelven a abrir las aulas.
Repetir
En su última reunión, el Consejo Escolar del Estado (CEE), el máximo órgano consultivo en materia educativa, pidió que se evitaran las repeticiones de curso, que se mantuviera el calendario escolar aprobado a principio del mismo y que se evaluara lo impartido en clase y «online», según las circunstancias de cada alumno para que ninguno se vea perjudicado por la brecha digital.
Un documento que representa a toda la comunidad educativa y que podría ser tenido en cuenta por Celaá y los consejeros, a los que varias ONG y expertos han pedido este martes que «dejen de lado sus diferencias», que pongan fin a la incertidumbre y que, como los países europeos de nuestro entorno, tomen medidas educativas «concretas y atrevidas».
Lo han hecho a través de una carta dirigida a Celaá, en una iniciativa promovida por Save the Children, en la que piden la apertura de los centros escolares en verano para «ofrecer oportunidades educativas» a los alumnos en situación desfavorecida o con desfase educativo y «modificar la evaluación del alumnado para limitar la repetición de curso».
Dar el curso por terminado
En este sentido, el profesor de Sociología de la Universitat de València Daniel Gabaldón, especialista en Educación, ha manifestado que el curso podría darse por terminado en la educación obligatoria para centrar los apoyos docentes en el alumnado más vulnerable, mientras que en la posobligatoria habría que asegurarse de que el estudiantado adquiere aquellas competencias y conocimientos que son «aval de los títulos que van a obtener».
El Gobierno de Castilla-La Mancha ya ha anunciado que mañana propondrá el refuerzo y profundización de los contenidos ya impartidos en el primer y segundo trimestre y que se avance sólo en los que se consideren básicos o esenciales para la promoción o titulación, así como evaluar el esfuerzo del alumnado.
Por su parte, la CSIF ha demandado que no se alargue el curso en julio, que las evaluaciones al alumnado sean continuas y que respeten la labor de los docentes, mientras que el sindicato de los trabajadores de la enseñanza privada FSIE ha reclamado «medidas concertadas y lo mas homogéneas posibles».
Los padres de la escuela pública, a través de la Ceapa, insisten en pedir un aprobado general para los alumnos, que las clases se extiendan a principio de julio y que no se evalúen las tareas realizadas en casa tras el cierre de las aulas.
Una reclamación que también llega desde el Foro por la Educación de Castilla y León, mientras que la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos Juan González (FAPA-RM) de Murcia insta a actuar con «flexibilidad» respecto al tercer trimestre del curso.
Pues si la situacion mejora, el curso se deberia cerrar el 31 de JULIO y empezar el nuevo el 1 de SEPTIEMBRE…con lo que cobren los prodesores y todas las ventajas socioeconòmicas que tienen es lo mínimo que deberían hacer…
Nominada al premio cuñado!!