EFE / Un hombre de 36 años acusado de un delito de agresión sexual por realizar tocamientos e introducir los dedos en la vagina de la hija menor de su pareja ha asegurado este martes en el juicio que eran «bromas» que se producían espontáneamente y que lo hacía delante de la progenitora.
La sección segunda de la Audiencia de Palma juzga a un acusado de abusar sexualmente en reiteradas ocasiones entre 2018 y 2019 de la hija de su pareja en Marratxí (Mallorca), a la que supuestamente contagió varias enfermedades de transmisión sexual, hechos por los que se enfrenta a una petición de 12 años de cárcel.
Durante el interrogatorio, el hombre ha asegurado que estas «bromas» de «tocar» las partes íntimas por encima y debajo de la ropa eran las mismas que le hacía a su pareja y que la niña de nueve años presenciaba estas situaciones. «Eran bromas tan normales», ha dicho, y ha añadido que no tenían ninguna intención sexual «ni nada».
El procesado ha apuntado que «en ningún momento» se quedaba a solas con la menor en el domicilio y que, en una ocasión, él llegó de noche del trabajo y cuando se estaba cambiando en su habitación, la menor entró, él le hizo cosquillas y bajó los pantalones al hombre, un episodio que la víctima ha recordado, si bien ha dicho que le bajó la prenda de vestir porque él le estaba tocando sus partes íntimas y pensó que así pararía.
En su declaración ante el tribunal, el encausado ha opinado que su relación con la víctima era muy buena, si bien a veces tenía comportamientos que no le parecían bien. También ha opinado que la menor sentía celos de la relación de su madre con el acusado.