@LauraFArambarri / Vicent Forteza, técnico del Parque Natural de ses Salines, apareció en algunos medios de comunicación hace unos años por sus sorprendentes agrografitis, es decir, sus creaciones labradas y/o sembradas en un campo junto al aeropuerto de Ibiza, de gran tamaño, y basadas en símbolos, eslóganes y otras imágenes
Unos los creó con una gran producción previa, ya que Forteza plantaba cebada siguiendo un diseño, de modo que, al crecer, apareciese el mensaje que quería lanzar al espacio y, en especial, a los turistas que visitan la isla cada año. Otros los ha hecho simplemente segando el campo.
Y lo cierto es que muchos turistas se han encontrado con sus mensajes al aterrizar o despegar del aeropuerto de es Codolar y han subido las imágenes a las redes. Los residentes que le conocen se las han enviado a su autor.
Lo curioso de este caso es que el último agrografiti lo hizo ya hace dos años: el símbolo de la lucha feminista. Pero en esa ocasión no trascendió demasiado. Sin embargo, la aplicación de imágenes áereas a la que se puede acceder en la web del Ideib del Govern balear ha inmortalizado para siempre este aerografiti.
«Este lo hice segando la hierba con un motocultor y tiene un diámetro de entre 25 y 30 metros, con lo que se ve bien desde el aire», explica Forteza, que ya ha dejado de hacer los grafitis en este terreno.
Así, la parcela no es de su propiedad sino de una amiga que le permitía explotarlo y, desde hace dos años, no crea más agrografitis «porque realmente llevan mucho trabajo», aunque asegura a Noudiari que echa de menos hacerlos.
Durante años, sus mensajes fueron muy comentados. Comenzó el 2012 un Salvem el Parc, que coincidió con varios despidos de personal de Medio ambiente y del Parque Natural de ses Salines. Continuó con uno contra las prospecciones petrolíferas con un mensaje: No oil, acompañado de un delfín (uno de los que más le costó hacer).
Continuó con un SOS H2O durante una etapa de sequía y a él le siguió la expresión N’hi ha un fart, que fue el más personal de todos porque expresa el propio hartazgo del autor con la realidad del momento de la isla. Un agrografiti dedicado a su hija Julia y este último que hizo por el Dia de la Dona de 2018 son sus últimas obras