El Ayuntamiento de Sant Antoni llevará al pleno de marzo la aprobación inicial de la modificación de la ordenanza fiscal que regula el Impuesto de Incremento del Valor sobre Terrenos de Naturaleza Urbana, conocido como plusvalía municipal.
La concejala de Economía y Hacienda, Eva Prats, ha anunciado que con esta modificación, el equipo de gobierno municipal ha decidido rebajar el tipo de gravamen de un 25% a un 20%, «lo que supone una bajada de un 20% de las cuotas resultantes a los ciudadanos del municipio de Sant Antoni”. “El tipo máximo legal que pueden aplicar los ayuntamientos es del 30%, pero hemos decidido rebajarlo aún más de lo que teníamos establecido, hasta el 20%, siguiendo en nuestra idea de rebajar la presión fiscal a los ciudadanos”, ha explicado Prats, que ha recordado que recientemente el Ayuntamiento también aplicó una bajada del 5,1% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
Por su parte, con la modificación de la normativa, la bonificación por mortis causa a familiares de primer y segundo grado se mantiene al 95%. Además, las otras bonificaciones que ya estaban establecidas también se mantienen.
La modificación de la ordenanza se realiza en atención y como consecuencia de la sentencia 182/2021 que declaraba inconstitucional y nula una serie de artículos de la Ley Reguladora de Haciendas Locales en cuanto al cálculo de la base imponible del impuesto. A consecuencia de esta sentencia, se aprobó el Real Decreto Ley 26/2021, de 8 de noviembre, que recoge el deber de modificar, en el plazo de seis meses, las ordenanzas fiscales del impuesto con el fin de adaptarlas al nuevo marco legal.
El impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana grava el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana en el momento en que se transmiten.