EFE / El crucero Costa Smeralda, bloqueado este jueves en el puerto italiano de Civitavecchia por un caso sospechoso de coronavirus, procedía de Palma, ha confirmado a Efe la autoridad Portuaria.
El buque, de la compañía Costa Cruceros, hizo escala en Palma, procedente de Barcelona, el pasado martes durante unas diez horas, entre las 7.40 y las 18.13 horas.
A los 6.000 pasajeros del crucero se les ha impedido desembarcar este jueves en el puerto de Civitavecchia hasta que se realicen los análisis a una crucerista originaria de Macao (China) que presentan síntomas compatibles con el nuevo coronavirus causante de la neumonía de Wuhan.
Fuentes del servicio de Sanidad Exterior han indicado que durante la estancia del barco en el puerto de Palma no se produjo ningún aviso relativo al caso que ha hecho saltar la alarma a la llegada de la embarcación a Italia, por lo que los síntomas sospechosos de ser causados por el coronavirus han aparecido durante la travesía hasta Civitavecchia.
Además de en Palma y Barcelona, los pasajeros de la nave, entre los que hay españoles, han realizado escala en el puerto francés de Marsella y se encuentran en este puerto cercano a Roma desde esta mañana a la espera de que se realicen los análisis a la mujer y no podrán descender hasta conocer los resultados.
El protocolo comenzó después de que la mujer de Macao, región autónoma de la costa sur de China, presentara fiebre y problemas respiratorios.
La enferma y su marido han sido aislados en el hospital del barco, según pudo saber Efe.
Hasta la nave se ha trasladado un equipo del hospital Spallanzani de Roma, que ha realizado las pruebas a la mujer y ha regresado al centro para analizarlos y dar un resultado lo antes posible.
La pareja, según los medios italianos, embarcó en el puerto de Savona, en Génova, noroeste de Italia, después de llegar al aeropuerto de Malpensa en Milán el pasado 25 de enero.
Dentro se vive una situación de «total normalidad» y los turistas esperan y charlan entre ellos en el recibidor y en los pasillos, explicó a Efe por teléfono uno de los viajeros que se encuentran a bordo, Filippo Rossi, acompañado por su familia.
El desembarco estaba previsto a las 9.00 locales (8.00 GMT) en el puerto romano y, aunque en un principio solo se anunció un retraso de media hora mientras se hacían gestiones de puerto, finalmente se ha prolongado, señala el turista italiano.
Ha sido pasado el mediodía cuando el comandante de la nave ha anunciado por megafonía que se estaban llevando a cabo los controles sanitarios pertinentes y llamó a la calma porque lo más probable es que se trate de una gripe común.
Mientras, las pruebas han sido llevadas al hospital Spallanzani, donde se están ya analizando, y los resultados definitivos se esperan en las próximas horas, cuando se permitirá bajar a los pasajeros.
El virus que comenzó en la ciudad china de Wuhan ha causado por el momento 170 muertos en China y más de 7.000 contagios.