El juicio a los militantes de Arran (organización juvenil de la izquierda independentista) acusados de lanzar confeti e irrumpir en un restaurante del Moll Vell de Palma para protestar contra la masificación turística se ha aplazado al 13 de junio de 2022.
Los juzgados de Palma tenían previsto desde este lunes la celebración del juicio contra los presuntos responsables de esta acción reivindicativa, si bien finalmente se ha pospuesto al próximo junio, según han detallado en una nota desde Arran y Alerta Solidària, otra asociación independentista.
Los hechos que se juzgarán se remontan a julio de 2017, cuando alrededor de una veintena de jóvenes irrumpieron en un restaurante del Moll de Vell de Palma, desplegaron una pancarta con la frase en inglés «El turismo mata Mallorca» y lanzaron confeti a los clientes de la terraza del establecimiento.
La propia organización juvenil difundió en redes sociales un vídeo en el que se recogía la protesta que un grupo de activistas llevó a cabo con pancartas, bengalas y confeti. «Paremos el turismo masivo que destruye Mallorca, que condena a la clase trabajadora de los Països Catalans a la miseria» era el mensaje que acompañaba al vídeo difundido por Arran.
En febrero de 2018, el juzgado de instrucción número 2 de Palma citó a de declarar a doce jóvenes investigados como presuntos autores de delitos de desórdenes públicos, daños y amenazas durante esta protesta. Desde Arran critican que el juicio por estos hechos se haya programado para el próximo junio, casi cinco años después.
Los acusados se enfrentan a penas que suman 29 años de prisión por desórdenes públicos. «Tirar confeti sale caro en Mallorca», reprochan desde la entidad.
Además, la organización recuerda que en su momento, la defensa presentó un recurso de apelación ante la Audiencia de Palma para solicitar el archivo de la causa ya que, entre otros motivos, muchos de los encausados no se encontraban en el lugar de los hechos, tal y como aseguran que ha quedado acreditado durante la instrucción.
Desde Arran sostienen que los encausados fueron llamados a declarar después de haber sido identificados de forma errónea a través de las fichas policiales. «La Policía sigue utilizando bases de datos ilegales de los jóvenes que participan en los movimientos sociales», dicen desde Arran, lo que puede criminalizar «de manera aleatoria» a las personas que asistentes a concentraciones o manifestaciones.
Además, desde la organización han vuelto a denunciar que el turismo en Mallorca «sigue teniendo vía libre para destruir la isla», así como para precarizar a la clase trabajadora, mientras consideran que los empresarios y hoteleros «siguen impunes» ante la destrucción del territorio.
EFE