@Noudiari / El Observatorio de Puig des Molins (OPM) gestionado por la Agrupación Astronómica de Ibiza (AAE) recibió durante 2019 un total de 1.900 visitantes, en turnos de mañana y de noche, para contemplar los cuerpos del sistema solar (principalmente, Luna, Sol, Júpiter y Saturno), así como otros objetos celestes visibles desde Ibiza.
De estas casi dos mil personas, 652 fueron estudiantes de centros educativos de la isla, que recibieron así un complemento educativo a la enseñanza que reciben en el centro. El Observatorio ofrece visitas públicas, que constan de una charla y una sesión de observación, tres días a la semana durante todo el año
Aparte de estas visitas semanales, el observatorio también realizó el año pasado dos jornadas de puertas abiertas, el 27 de septiembre y el 5 de octubre, para observar Júpiter, Saturno y la Luna. Un total de 435 personas asistieron a esta convocatoria.
Por otro lado, las cámaras de detección de bólidos (estrellas fugaces de grande tamaño) instaladas en el OPM han trabajado a pleno rendimiento durante el 2019 y han tenido la oportunidad de ser las únicas de España que han conseguido grabar un bólido de brillo excepcional, más intenso que la luna llena. Esto pasó el 16 de agosto, cuando un fragmento rocoso procedente del espacio interplanetario penetró en la atmósfera de la Tierra, probablemente a la altura de Italia, y causó un fuerte resplandor que fue grabado por una de las cámaras del observatorio. La NASA confirmó poco después que ha sido uno de los bólidos más brillantes observados recientemente.
Precisamente, durante este año se han instalado dos nuevas cámaras de bólidos, en el Telescopio de Cala d’Hort, para complementar las tres que ya funcionan en Puig des Molins. De este modo se cubre la totalidad del cielo de las Pitiusas.
La Agrupación Astronómica de Ibiza, por otro lado, ha realizado varios trabajos de divulgación científica, como cuatro encuentros públicos de observación en diferentes lugares de Ibiza y también de Formentera, dos conferencias para conmemorar la llegada del hombre a la Luna, charlas y observaciones en diferentes escuelas e institutos de Ibiza y talleres astronómicos para jóvenes.
Contaminación lumínica
En cuanto a la lucha contra la contaminación lumínica, se han instalado dos fotómetros lumínicos TESS-W, uno en el propio OPM y la otra en la zona de Sant Miquel, encargados de medir la oscuridad del cielo nocturno. Los resultados se comparten dentro del programa Stars4All, que coordina un colectivo científico vinculado en la Universidad Complutense de Madrid.
Estos dos fotómetros se añaden a los otros dos que la AAE ya tiene instalados desde hace unos años en el Telescopio de Cala d’Hort y en Sant Jordi.
Así mismo, se ha recorrido la isla de Formentera para hacer la primera medición de la calidad de su cielo, un trabajo que todavía continúa, pero de la que ya se tienen resultados preliminares.
En materia de contaminación lumínica se ha hecho también una exposición y una conferencia durante el verano, en Jesús, y se ha iniciado una campaña informativa a nivel general para informar de este fenómeno. Pero la principal actividad continúa siendo el impulso de un reglamento insular que regule jurídicamente la iluminación exterior para reducir este peligro astronómico y medioambiental.
El 2019 se adquirió una colección de meteoritos que permanecen expuestos en el aula del observatorio de Puig des Molins. Se adquirieron un total de 14 piezas, que se irán incrementando progresivamente, y entre ellas hay material procedente de la Luna, Marte y el cinturón de asteroides.
En el Telescopio de Cala d’Hort, propiedad del Consell de Ibiza e igualmente gestionado por el AAE, continuaron los trabajos de obtención de fotografías de alta resolución, de forma que se va incrementando el banco de imágenes disponibles para ir procesando estos campos. De igual manera, se ha iniciado la actividad mencionada de detección de bólidos con las dos cámaras instaladas.
Durante el 2019 se empezaron las gestiones administrativas destinadas a instalar un segundo telescopio en Cala d’Hort, este dirigido a la observación directa y pensado para recibir visitas de institutos durante algunos días al año, para servir de complemento educativo en estos centros.
Este segundo telescopio será una realidad a lo largo de 2020, gracias a la inversión que realizará el Consell de Ibiza. Tendrá un diámetro de medio metro y permitirá la observación de galaxias, nebulosas y cúmulos lejanos gracias a su potencia y luminosidad.
Este nuevo telescopio irá acompañado de la edición de una guía didáctica para reconocer los objetos observados e informar sobre sus características principales.