La patronal del ocio nocturno estatal ‘Spain Nightlife’, alerta de que las fiestas ilegales y los botellones van a proliferar «mucho más de lo que lo han hecho hasta la fecha y que será imposible por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad controlarlos, todo ello debido a la falta de oferta de ocio nocturno legal y controlado, lo cual va a derivar en un aumento de contagios y de presión hospitalaria», afirman en un comunicado.
La asociación considera que el concierto piloto de Love of Lesbian en el Palau Sant Jordi con 5.000 asistentes «ha aportado una nueva dosis de optimismo de cara a la reapertura del ocio nocturno antes del verano, por lo que desde ‘Spain Nightlife’ seguimos insistiendo en que ello ya es posible si se lleva a cabo con las correspondientes medidas de seguridad y con la colaboración de los locales legales y bajo un estricto derecho de admisión y con un aforo y horario que proponemos que sea variable en función de las medidas de seguridad existentes en el local».
Piden al Gobierno central y a las autonomías que dejen sin efecto la orden del 14 de agosto de 2020 y se les permita funcionar con criterios y requisitos «claros». Solicitan una fecha para empezar a trabajar, insisten en implementar medidas de seguridad en sus negocios y cumplir restricciones de aforo y horarios.
«Los test previos van a permitir detectar casos asintomáticos que de otra forma no serían detectados y con una app con código QR (compatible con la vacuna también ) y los aparatos de desinfección de aire y superficies se mejorará incluso la seguridad que existía en los conciertos de la Sala Apolo y del Palau Sant Jordi y, desde ‘Spain Nightlife’ defendemos que aquellos que dispongan de más medidas de seguridad puedan disponer de más horario y aforo, con el fin de incentivar la implementación de las máximas medidas de seguridad, pues hay que valorar que cada hora de más que una persona permanezca en un espacio seguro, hora de menos que pasará en un espacio no controlado e inseguro», dicen desde la asociación.
Cataluña e Ibiza proponen sendas pruebas piloto reales para una reapertura segura
La Asociación Ocio de Ibiza (AOI) y la Federación Catalana de Actividades de Restauración y Musicales (FECASARM), ambas adheridas a ‘Spain Nightlife’ han propuesto a sus respectivos gobiernos autonómicos llevar a cabo sendas pruebas piloto con medidas de seguridad «para demostrar que ya es perfectamente posible recrear una noche «prepandemia» con todas las garantías si los locales se utilizan como muro de contención frente a las fiestas ilegales y botellones». Tal y como explica José Luis Benítez, portavoz de Ocio de Ibiza y vicepresidente de ‘Spain Nightlife’, «la administración nos tiene que ver como aliados imprescindibles, pues nuestros locales ofrecen un nivel de seguridad que se encuentra a años luz del que existe en las fiestas ilegales y botellones, donde nadie lleva mascarilla ni guarda distancia de seguridad, ni se hace un test previo, ni existe control de aforo, ni hay posibilidad de rastrear un contagio, se bebe de la misma botella y se comparten cigarrillos».
En la prueba piloto de Barcelona se ha propuesto la participación de, entre otros, de 5 locales que se encuentran en las más recientes listas de los 100 mejores locales de ocio nocturno del mundo (Pacha Barcelona, Shôko Barcelona, Input High Fidelity Club, Opium Barcelona y Sala Apolo). En cuanto a Ibiza. los locales participantes en la misma están todavía por concretar aunque cabe recordar que Ibiza es el destino que, hoy por hoy, más locales de la lista de los 100 mejores locales del mundo alberga, «situación que peligra si la Administración no hace posible una reapertura inminente ya que muchos de ellos no podrán aguantar más meses de cierre» tal y como explica el portavoz de Ocio de Ibiza.
Representantes de Ocio de Ibiza y de FECASARM están manteniendo estos días reuniones de manera periódica con sus respectivos gobiernos autonómicos y permanecen a la espera de que se les autorice a llevar a cabo dichas pruebas piloto y que las mismas sirvan, no tan solo como un experimento más sino como el pistoletazo de salida hacia una reapertura normalizada y continuada y con las mínimas e imprescindibles restricciones para garantizar el binomio salud / viabilidad económica.