EFE / El pleno del Parlament rechazó ayer las tres enmiendas a la totalidad de devolución contra el proyecto de ley agraria de las Islas Baleares que continuará su tramitación parlamentaria en ponencia y en comisión.
En el último punto de la sesión plenaria, el Proyecto de ley agraria de las Islas Baleares ha superado las tres enmiendas de los grupos mixto (Ciudadanos), popular y de Proposta per les Illes (el PI), defendidas respectivamente en el hemiciclo por Olga Ballester, Miquel Vidal y Jaume Font, ha informado la cámara en un comunicado.
Ciudadanos planteó la enmienda a la totalidad porque considera que el proyecto no ha recibido el apoyo unánime del sector.
Critica además que la norma olvida y perjudica a las explotaciones agrarias pequeñas que son las que más dificultades tienen para ser rentables al reducir las posibilidades de complementar las rentas agrarias y además las excluye de la exoneración de condiciones urbanísticas para construir instalaciones agrarias necesarias para su actividad.
Ballester ha tildado de «despropósito» que la ley generalice la figura del interés general para las infraestructuras necesarias para llevar a cabo la actividad agraria porque incrementará los trámites burocráticos, procedimientos y gastos y ralentizará la productividad de la explotación.
Ciudadanos la considera además imprecisa en numerosos conceptos que pueden generar problemas de interpretación, arbitrariedad e inseguridad jurídica y critica que la norma introduce un alto grado de discrecionalidad por parte de otras autoridades no agrarias que podrán limitar el uso agrario del suelo agrario utilizando parámetros y normativas urbanísticas.
Para el grupo popular «el Proyecto de Ley no responde a las necesidades reales de la sociedad de las Islas Baleares ni a las el sector agrario» y es «una ley innecesaria que no cuenta con el apoyo del sector».
Alegan que «propone una visión de la agricultura mayoritariamente subvencionada que genera un sector débil y que no se adapta a la realidad actual de la agricultura en las Islas Baleares «.
«Falta de consenso»
Para el Pi, la ley adolece de «falta de consenso con los actores implicados y especialmente con las organizaciones agrarias; implica restricciones para mejorar y potenciar la ampliación de la actividad agraria en las Islas Baleares; supone un exceso de burocracia y complica los trámites administrativos; realiza previsiones contrarias a las competencias municipales y cambia el sistema legal de usos en suelo rústico «.
Las tres enmiendas han sido rechazadas por 30 votos en contra (Mixto-Huertas, Mixto-Aguilera, Mixto-GentxFormentera, MÉSxMenorca, MÉSxMallorca, Podemos, y grupo socialista), 21 votos a favor (Mixto-Ciudadanos, Popular y El Pi) y la abstención de Montse Seijas del grupo mixto.
Superadas las tres enmiendas a la totalidad, se formará en el seno de la comisión una ponencia que elaborará un informe. Una vez concluido el informe de la ponencia, comenzará el debate en comisión, que se hará artículo por artículo y se elaborará un dictamen.
Debatido y votado el dictamen, se convocará el pleno para su debate, con todas aquellas enmiendas y votos particulares que, habiendo sido defendido y votados en comisión, no hayan sido incorporados al dictamen y quieran defenderse de nuevo ante el pleno.
Hay 351 enmiendas parciales al proyecto: 52 de Ciudadanos, 15 de MÉS per Menorca, 2 de la diputada Seijas, 10 de Xelo Huertas, 94 del grupo popular, 24 de Gent per Formentera, 67 del Pi, 39 de Podemos y 30 del socialista.