El Grupo Popular Municipal en el Ayuntamiento de Sant Josep preguntará en el próximo pleno al equipo de gobierno por las medidas que piensa tomar «para acabar con la venta ambulante en las playas y puntos turísticos del municipio».
La concejal popular Nieves Bonet ha explicado que “a pesar de que la temporada ha empezado tarde, y no con la afluencia de turistas que nos gustaría, sí que podemos ver en todo el municipio de Sant Josep una gran cantidad de vendedores ambulantes que lo único que hacen es molestar a visitantes y residentes, dar mala imagen como destino turístico y perjudicar a nuestro tejido comercial”.
El partido en la oposición relata que muchos de estos vendedores se dedican a comerciar con comida y productos manipulados “sin ninguna garantía sanitaria” y con el «consecuente peligro que puede tener para todos los consumidores», “y más en año de pandemia”.
También lamentan la venta de gafas de sol y juguetes para niños “sin ninguna certificación”, entre muchos otros productos.
Además del impacto sanitario, «este tipo de venta puede tener un fuerte impacto en el tejido comercial y hostelero del municipio, pues este tipo de vendedores actúan prácticamente sin gastos, sin pagar ni un solo impuesto ni cotización, siendo, por tanto, una competencia desleal contra quien hace las cosas de acuerdo con la ley», remarcan los populares.
“Este ya está siendo un año suficientemente difícil para todas las empresas como para encima tener que soportar a un vendedor pirata en la puerta, quitando clientes sin asumir las obligaciones que tienen todos los negocios legales”, ha concluido Bonet.