@Noudiari
La Audiencia Provincial de Palma juzga a partir de esta mañana uno de los casos que más estragos ha causado en la sociedad pitiusa en los últimos años. Mohamed el Badouil está acusado de un asesinato y otros nueve en grado de tentativa, además de uno de atentado, otro de daños y dos por lesiones, por lo que la fiscalía le reclama 84 años de prisión. El Badouil declarará a partir de las diez, en una vista pública que continua mañana y los días 29 y 30.
El día de furia de este ciudadano marroquí empezó a las doce y media del mediodía del 23 de febrero de 2011. Salió del Hostal Mariano de Sant Antoni, donde se alojaba, con un cuchillo de 10 centímetros. Se dirigió al supermercado Suma, en la calle de la Mar y directamente acuchilló a un reponedor, a quien alcanzó el cuello, y a una cajera en la cabeza. Salió de este establecimiento y al grito de «hijos de puta, os voy a matar» la emprendió con el arma con todo aquel con quien se encontrara. Primero se dirigió al supermercado can Micaló y mató a su propietario, Antonio Boned, un hombre de 48 años al que seccionó la yugular, entró en coma y falleció un mes después. Su mujer, que también se encontraba en el establecimiento, fue acuchillada por la espalda, causándole una herida de la que tardó un mes en recuperarse.
Según relata el escrito de acusación, «al salir del supermercado Micaló, el acusado siguió corriendo por la calle Progreso y apuñaló en el lado derecho del cuello con la intención de matar» a una joven de 25 años que tardó un mes en recuparse de las heridas. Mohamed el Badouil siguió obcecado en su frenesí asesino y apuñaló otro hombre de 74 años que se cruzó en la calle Menéndez Pidal, tras lo que entró en un locutorio y clavó el la cara de un hombre que acabaría perdiendo un ojo. En la misma calle acuchilló a otros tres hombres que se interpusieron en su camino. A la última le arrebató un palo con el que golpeó el coche de un vecino que acudió para intentar frenarlo y después a los agentes de la Guardia Civil que lo detuvieron.