NouDiari / Sin procesiones por segundo año consecutivo a causa de la pandemia, la Semana Santa ibicenca ha sido este año un tanto más discreta y recogida de lo habitual.
Sin embargo, lo que no ha faltado ha sido la cita con una de las tradiciones más arraigadas en Ibiza durante el Jueves y el Viernes Santo: la visita a las Cases Santes.
Iglesias y parroquias de Ibiza, como es costumbre, rivalizan estos días de forma sana en la ornamentación de las capillas, lo de que propicia un estallido visual de color en el interior de los templos, como ha ocurrido en el de Sant Antoni de Portmany, tal y como se aprecia en las imágenes que acompañan este texto.
La casa santa es la veneración de la eucaristía dentro de la celebración de la liturgia el día de Jueves y Viernes Santo en el contexto del triduo de Pascua, que es la solemnidad más grande de los cristianos.
El origen está ligado a la fiesta del Jueves y Viernes Santo. En el siglo III ya se celebraba en Jerusalén. Tuvo un impulso importante en el siglo XIII, cuando el papa Urbano IV fomentó la adoración eucarística.