El verano es caluroso, el amor arde fuerte como Suiza. Viaja en nuestro avión a reacción a Ibiza. Invierno en Aspen, Colorado. Ama como una roca Lo sabemos, querida, nadie se nos puede comparar en ninguna parte.
Eso es básicamente lo que dice el estribillo de esta canción titulada Ibiza y que acaba de lanzar la cantante croata Marina Viskovic.
Un tema que se puede calificar de muchas maneras, aunque la más suave sería decir que es pegadizo.
El vídeo acumula a día de hoy casi 400.000 visualizaciones, lo que no está nada mal ya que fue lanzado hace pocos días, este pasado martes 28 de junio.
Tanto este como otros vídeos recientes de canciones tituladas ‘Ibiza’ tienen en común una puesta en escena muy concreta y que dice mucho sobre la imagen que se ha creado alrededor de la isla en la última década: la ostentación del lujo.
Todos ellos muestran o coches deportivos o lujosos, a veces aviones privados, yates, motos de agua, grandes mansiones, piscinas, ropa o gafas de sol con marca bien visible o mujeres que se lucen como objetos. Tampoco faltan las copas de champán.
Otra canción, esta vez rumana, se ha convertido en un gran éxito en Rumanía y no es raro que suene en bodas y en karaokes. Se trata de ‘La Ibiza si Dubai’ de Puiu Codreanu.
Prueba de su gran acogida es que acumula 7.470.392 visualizaciones solo en Youtube desde la fecha de lanzamiento: el julio de 2020
Los vídeos anteriores no han sido rodados en Ibiza pero sí el que mostramos a continuación.
La canción de Marianne Cathomen y Hansy Vogt se titula ‘Vino de verano’ y tampoco hay que usar muchos adjetivos para describirlo porque se define a sí misma. La pieza ha sido grabada, en parte, en la mansión de Tagomago.
También nos encontramos con otro ejemplo, más cercano a los dos primeros en estética, que es este ‘Ibiza’ del griego Trannos, que acumula más de 5,3 millones de reproducciones desde el pasado 20 mayo 2022. No está rodado en Ibiza y su estribillo dice, ni más ni menos: «Vacaciones en Ibiza Conocí a una prostituta […] nos lo bebimos todo»
Ya no tan reciente, pero con más 30 millones de visualizaciones, nada menos, se posiciona el videoclip de Tyga también titulado Ibiza. Aquí tampoco hace falta describir mucho porque el vídeo habla por sí solo.
Otra horterada de chicas en bikini y lujo de cartón piedra es Ibiza de The Manor. Este ejemplo ya no es tan reciente, ya que data de agosto de 2018. Desde entonces suma 980.242 visualizaciones.
En este caso parece que la letra de la canción está patrocinada, ya que no paran de aparecer grandes marcas del ocio nocturno ibicenco.
La lista de canciones que de un tiempo a esta parte se titulan Ibiza parece interminable. Otro ejemplo, este de Asu, Kalif y Tamara. En este caso el vídeo tampoco dice nada especial. Se queda corto en horterada y deja bastante indiferente. Aún y con todo suma 1.562.319 visualizaciones desde el 10 de octubre de 2020.
No tan hortera (aunque depende de con qué se compare), pero también sorprendente es encontrarse con este ‘Ibiza’ del rapero neerlandés Bilal Wahib, con casi dos millones de reproducciones en Youtube: Contigo quiero desaparecer, sí desaparecer en Ibiza. La conocí en Ibiza, sexy señorita, dice una parte de la canción.
Diria que lo que es veu en es vídeos és el que li ve en es cap a sa majoria de gent de fora (estrangers i nacionals) quan senten sa paraula «Ibiza». Fins i tot diria que alguns ni manco saben on és sa nostra illa, però tenen aquesta imatge igualment. «Ibiza» ja no és el nom d’una illa, sinó una marca, un so, un estil de vida, una manera de fer vacances, etc. I això és perquè sa indústria de sa festa ha fet molta feina per instaurar aquesta imatge de sa nostra illa arreu.
Alguns (com els protagonistes d’aquests clips) se n’aprofiten i naltros en patim ses conseqüències.