La luna llena rosa de abril se ‘posó’ anoche sobre el faro de Botafoc, en Ibiza. Al menos ese es el efecto visual conseguido por el fotógrafo Paco Natera, en esta imagen tomada desde el final de la marina con un focal 600 mm, a las 21.40 horas de ayer.
Así, la luna rosa, un espectáculo astronómico bellísimo, debe su nombre a una tradición de los nativos americanos, recogida en el Farmers’ Almanac. Cada plenilunio recibe un nombre relacionado con el campo y lo agrícola, de modo que la luna llena rosa debe su nombre a su coincidencia en el tiempo con la floración de un musgo de color rosa o Phlox subulata.
Que meravella de foto. S’Enhorabona al fotògraf.