(EFE).- El presidente del PP de Palma, Jaime Martínez, ha sido elegido este sábado nuevo alcalde de la ciudad con el único respaldo de los once concejales de su grupo, con mayoría relativa en el consistorio. El nuevo alcalde, que recupera el Ayuntamiento de Palma para el PP tras ocho años de gobiernos de coalición de izquierdas, ha optado por gobernar en minoría al rechazar la propuesta de gobierno conjunto de Vox, que cuenta con seis ediles.
Tras jurar el cargo y tomar la simbólica vara de mando de las manos de su predecesor, el socialista Jose Hila, Martínez ha hecho un breve discurso en el que ha llamado al entendimiento y el consenso en favor de los vecino de la ciudad: «Dejemos de poner el punto de atención en las pocas cosas que nos separan».
Ha calificado de «extraordinario reto» la tarea que afronta y ha prometido abordar la responsabilidad con «autoxigencia, vocación de servicio público, humildad y diálogo».
El alcalde ha reiterado hasta en tres ocasiones la apelación al diálogo y el entendimiento entre las fuerzas políticas en torno a su «hoja de ruta», un programa de actuación en torno a la cultura, el deporte y el medio ambiente como ejes de la legislatura. A corto plazo, ha remarcado, sus prioridades serán mejorar la limpieza, la seguridad y la movilidad, facilitar el acceso a la vivienda y aplicar «una revolución fiscal» que favorezca a las familias y reactive la economía. Su proyecto, ha insistido, persigue la «prosperidad» de todas la ciudadanía, con una «mejora en la gestión de recursos», para convertir Ciutat de Mallorca en «la capital de referencia del Mediterráneo».