@Noudiari / La CGT de Baleares (Confederación General del Trabajo) valora positivamente la paralización de la economía no esencial decretada por el Gobierno central desde este lunes con motivo del Estado de Alarma por el Covid-19. Sin embargo, no aprueban que sea «la clase trabajadora la que vuelva a pagar las consecuencias de esta crisis», informan en un comunicado.
La CGT detallan lo motivos por los que esta medida afectará a los trabajadores más que a los empresarios, ya que se estima que se han producido más de dieciséis mil ERTE con más de doscientos mil trabajadores afectados. «Si los trabajadores de baleares son pobres, con las medidas económicas adoptadas por el Gobierno serán aún más pobres. Las pequeñas empresas están exentas de pagos de cotizaciones a la seguridad social, siendo totalmente insolidarios con sus empleados», afirman por lo que exigen a estos empresarios que complementen hasta el cien por cien los ingresos de sus trabajadores.
Tampoco se olvidan de los trabajadores temporales que se quedan fuera de los ERTE, «muchos de ellos sin ningún ingreso económico», detallan. La CGT defiende la renta básica universal, por lo que exige al Govern balear , que cumpla con el Estatut Balear donde se garantiza la renta básica en los artículos 20 y 21, «así como el compromiso con la firma de la carta social, no puede quedar nadie atrás», insisten.
«El problema se agrava en las islas Baleares con el acceso a la vivienda, donde más del 58% son mujeres y que el uno de abril , no podrán pagar el alquiler. Las medidas del gobierno de créditos al 0% de interés no es la solución para garantizar la sobrevivencia de miles y miles de personas que no tienen ingresos ni trabajo por la situación de emergencia sanitaria, y los que se han acogido a los ERTEs tendrán que decidir entre comer o pagar alquileres abusivos o hipotecas», destacan.
Para CGT, la ampliación del estado de confinamiento del sector servicio principalmente, vulnera los derechos y dignidad de los trabajadores. «No aceptamos que la clase trabajadora tenga que pagar de su bolsillo el confinamiento. Las empresas defraudaron mas de diez millones de horas extras el pasado año, por lo que exigimos que sean la empresas las que asuman el coste».
Para finalizar, asumen que no pueden cuantificar las consecuencias socio laborales. «Miseria, pobreza y necesidad, porque se han empeñado que su guerra la pague la clase trabajadora. Que nadie se quede atrás, renta básica, derecho a la vivienda y organización obrera».