@Noudiari/ La Delegación del Gobierno en Illes Balears ha solicitado hoy al Govern balear y a los cuatro consells insulares que presenten con «carácter de urgencia» una primera valoración de los daños producidos por el último temporal de lluvia y viento que ha azotado las islas este fin de semana.
La petición de las valoraciones se debe a la posibilidad de declarar a Balears como ‘Zona de Especial Afectación’ por los fenómenos meteorológicos adversos de los últimos días, lo cual podría dar acceso a ayudas económicas encaminadas a solucionar los desperfectos.
La Delegación del Gobierno precisa conocer los ayuntamientos afectados y el carácter de los daños producidos (agrarios, rústicos, infraestructuras, viviendas, etc.). Asimismo, necesita, en la medida de lo posible, una primera valoración económica de los daños producidos. Una vez que se conozcan y se cuantifiquen los desperfectos causados por temporal, se podrá comenzar a valorar la posible solicitud de ayudas económicas, que servirían para solucionar algunas de las incidencias que ha dejado la ola de frío en Baleares.
En el caso de las Pitiusas, las tormentas y el temporal de viento de los últimos días se han saldado con una desprendimientos de fachadas, árboles caídos, paseos marítimos en mal estado, caídas de postes de la luz y otros desperfectos. Ahora habrá que realizar una estimación económica del alcance de esos daños para que las administraciones puedan realizar las gestiones necesarias para acceder a las ayudas económicas.
El Govern ya ha empezado a valorar los daños
El Govern balear ya ha comenzado a valorar los daños causados por el temporal. De hecho la presidenta Francina Armengol y el conseller de Medio Ambiente, Vicenç Vidal, han visitado este lunes el municipio mallorquín de Sa Pobla, uno de los más afectados por el temporal, para evaluar in situ los daños y han explicado que toda aquella persona que haya sufrido los estragos del mal tiempo debe ponerse en contacto con la administración para calcular los daños.
Las pérdidas afectan, no solo al sector de la agricultura que ha visto muchas de sus tierras de cultivo anegadas, también a los pescadores que no han podido salir al mar en las últimas jornadas o a los propietarios de negocios que han sufrido cortes en el suministro eléctrico que les hayan podido ocasionar pérdidas.