La diócesis de Ibiza ha acogido este lunes la noticia de la muerte del Papa Francisco con un “profundo dolor”, según ha informado en un comunicado.
El obispo, Vicent Ribas, ha pedido para este mediodía, a las 12.00 horas, que tocaran a difunto las campanas de todas las iglesias de la isla.
Ribas ha destacado que Francisco fue un Papa “cercano, valiente y profundamente humano”, comprometido con la actualización del Concilio Vaticano II, la defensa de los pobres, la justicia social y el cuidado del planeta. “Ha sido un hombre de Dios, a veces incomprendido, incluso dentro de la Iglesia, pero siempre fiel a su misión como sucesor de Pedro”, ha afirmado.
El obispo, que fue nombrado por el propio Francisco, ha recordado con emoción sus encuentros personales con él: “Me conocía, me trató con cariño, como un padre a su hijo. Me dio paz y fortaleza en momentos difíciles”.
La diócesis celebrará una misa funeral en su memoria en los próximos días, cuya fecha se anunciará próximamente. Ribas ha pedido a los fieles que recen por el Papa y por la elección del nuevo sucesor de San Pedro.
Redacción / EFE
