La CAEB no descarta acudir a los tribunales para impugnar el inpuesto «verde» contra las grandes superficies comerciales aprobado por el Govern. El presidente de la asociación empresarial, Josep Oliver, ha afirmado que este impuesto es «inasumible» después de la reunión que ha mantenido con diversos representantes del Govern, encabezados por el vicepresidente económico Josep Ignasi Aguiló.
A la salida de la reunión, el representante de Carrefour Empresas, Francisco García, ha sostenido que este impuesto «pone en peligro» a las grandes superfícies en Balears ya que, en la actualidad, sus beneficios «son mínimos». Por parte de Eroski, Alfredo Herraez amenaza con despidos si se aprueba este impuesto, ya que supondría pérdidas para su negocio.
El ejecutivo autonómico calcula que el nuevo impuesto sobre grandes superfícies tendrá una recaudación de 8,5 millones de euros, y se basa en una estimación a grosso modo de conceptos como el impacto territorial del negocio o la contaminación que generan los coches de sus consumidores.
Esta situación de enfrentamiento entre Govern y patronal es inédito ya que, tradicionalmente, los ejecutivos del Partido Popular y las asociaciones empresariales han solido mantener una luna de miel. No obstante, la situación de emergencia económica en la que viven las finanzas públicas y que obligaron a Bauzá a solicitar el rescate financiero al Estado, ha hecho que el Govern se vea forzado a subir los impuestos a las empresas aunque, apuntan, lo hacen en «en contra» de su ideología y forzados por las circunstancias.