La asociación Unión de Guardias Civiles ha tildado este domingo de «pesadilla» las dificultades para encontrar vivienda de los agentes en prácticas destinados este verano a Baleares y ha exigido una «solución urgente» de este problema a los responsables políticos.
En un comunicado, el secretario general de la organización en Baleares, José Gregorio Barajas, ha demandado un incremento del complemento de insularidad que perciben los agentes destinados al archipiélago, que es de 90,55 euros mensuales en Menorca, Ibiza y Formentera y de 71,90 euros en Mallorca.
«Estas cantidades son absurdas para vivir en este archipiélago y costear el altísimo coste de la vida», subraya Barajas, que incide en que la peor manifestación de esta carestía es el precio del alquiler de vivienda en Ibiza y Formentera.
Relata que desde el pasado jueves muchos de los guardias civiles en prácticas «que han tenido la mala suerte de venir destinados a Baleares» están quejándose de graves problemas para encontrar alojamiento.
Detalla un caso de la familia de un guardia destinado a Ibiza que ha alertado de que podría verse obligada a dormir en el coche o en una tienda de campaña.
«Es indignante que estos empleados públicos, que vienen a desempeñar sus funciones de seguridad ciudadana en las islas de Ibiza y Formentera, no tengan alojamiento. Este problema genera la pérdida masiva de muchos funcionarios de toda la administración general del Estado, dejando los servicios para los ciudadanos baleares al borde del colapso», enfatiza la asociación.
Se queja asimismo de las «palabras bonitas» de los políticos autonómicos y de la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, que no se traducen en medidas eficientes para resolver el problema.
EFE