Lucía Muñoz, diputada de Unidas Podemos en el Congreso por Baleares, ha defendido este martes durante el Pleno del Congreso la regulación del cannabis, y ha explicado desde la tribuna que «es hora de mirar de frente a la realidad social del cannabis, que cuenta con una demanda que tiene rostro», refiriéndose a las asociaciones que han visitado este miércoles el Congreso para asistir al debate.
La diputada de Unidas Podemos ha señalado que «hay una tendencia internacional hacia la regulación del cannabis a nivel europeo, y como ejemplo tenemos Alemania, con un presidente socialista. Sería bueno que no nos quedáramos por detrás de la sociedad y de la tendencia internacional. Negando la realidad lo único que hacemos es favorecer prácticas mafiosas. Votar en contra de la regulación del cannabis es posicionarse en contra de la salud pública».
«Una persona conocida dijo que tenemos que estar al lado de la normalidad y hacer un ejercicio de realismo. Esta frase la dijo el actual Ministro de Cultura y Deporte Miquel Iceta. Es mejor regular que prohibir, otra frase, esta vez de Patxi López. Debemos mirar a los ojos de la realidad social del cannabis y regularlo, ya que siempre que se habla de esto se cae en reducciones simplistas, a un ejercicio de equilibrismo por parte de los grupos políticos que no nos deja ver la cuestión que hay de fondo», ha explicado Muñoz desde la tribuna.
«El cannabis es una planta, nada más, que tiene usos terapéuticos y medicinales. Con cannabis se pueden producir textiles, materiales de construcción, biocombustibles, productos alimentarios. Es una planta que crece muy bien en suelos pobres», ha recordado Muñoz, quien ha añadido que «el enfoque prohibicionista en las políticas públicas de regulación del cannabis es ineficaz y se basa en la persecución de las personas usuarias».
Para finalizar, Muñoz ha afirmado que «lo que debemos hacer es escuchar a los datos, y es que en nuestro país hay cuatro millones de personas que consumen cannabis, miles de asociaciones cannábicas que en algunas comunidades autónomas ya se han definido como entidades medicinales, centenares de páginas web de tiendas físicas de CBD, bancos de semillas, y hasta cuatro ferias del sector, algunas con reconocimiento internacional. Es una realidad social a la que debemos mirar de frente».