La Policía Local de Ibiza ha instalado nuevas cámaras de videovigilancia, esta vez en la calle Obispo González Abarca, junto a los contenedores de basura, ya que este es uno de los puntos críticos donde la concesionaria se encuentra más basura depositada fuera de los lugares indicados para echarla.
Las multas pueden alcanzar los 3.000 euros. La Policía Local advierte de que muchos ciudadanos siguen incumpliendo las más elementales formas de civismo y crean auténticas montañas de basura.
Es más, los agentes informan de que ya han podido identificar a una persona infractora en el primer día en el que la cámara estaba operativa. Y advierten: «no seas el próximo».