El Ayuntamiento de Sant Josep ha presentado los nuevos refugios y reservas de lagartijas, ubicados en el recinto exterior del Auditori Caló de s’Oli, uno de los tres espacios elegidos para iniciar esta iniciativa en el municipio, además de los situados en Can Raspalls y Port des Torrent.
Así, el pasado mes de junio, el Pleno ordinario aprobó por unanimidad declarar los jardines públicos municipales como refugio y reserva de lagartijas, comprometiéndose a implementar medidas para garantizar la protección y conservación de esta especie autóctona. Estas zonas ajardinadas, situadas en edificios de oficinas municipales, centros educativos, de salud o áreas deportivas, están consideradas un hábitat adecuado para funcionar como refugios de lagartijas, con mejoras previstas para 2024 y los próximos años.
La conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural, a través del Consorcio para la Recuperación de la Fauna (COFIB), en colaboración con los ayuntamientos de la isla de Ibiza y con el apoyo del Consell Insular, ha impulsado la creación de reservas urbanas para conservar y proteger la lagartija de las Pitiusas. Con esta iniciativa, la dirección general de Medio Natural y Gestión Forestal, a través del Consorcio para la Recuperación de la Fauna de las Illes Balears (COFIB), «pretende establecer medidas para aumentar la densidad de esta especie y minimizar los riesgos de depredación que enfrenta», destacan en un comunicado.
“Como todo el mundo sabe, la lagartija pitiusa es muy vulnerable, sobre todo tras la aparición de las serpientes, que representan una gran amenaza, entre otros depredadores, que ponen en grave peligro la supervivencia de la especie si no actuamos con contundencia”, explicó la concejala de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Litoral, Felicia Bocú.
Por su parte, Víctor Colomar, miembro del COFIB, definió estos refugios y reservas como “las casas y los barrios de las lagartijas” donde “tienen su propio ecosistema, donde esconderse y protegerse de las temperaturas adversas y de sus depredadores”. Entre sus características destaca que “la mayoría de ellos cuentan con paja y madera, que reúnen unas condiciones climáticas adecuadas y están recubiertos de piedra para ser resistentes e impermeables”.
El contrato de mantenimiento de zonas verdes municipales, actualmente en proceso de licitación, prevé la instalación de 80 refugios adicionales y más vegetación adecuada para las lagartijas. El objetivo final es favorecer la protección y conservación de la lagartija de las Pitiusas en todo el municipio de Sant Josep de sa Talaia.
Raül Luna, técnico de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sant Josep, destacó: “para favorecer la presencia de la lagartija en nuestro municipio, trabajamos para que las zonas ajardinadas, con flora autóctona, reúnan las mejores condiciones, tanto para que puedan protegerse como para que puedan alimentarse y, por supuesto, reproducirse”.
Estas actuaciones y el material que se difundirá se enmarcan en el Proyecto de control y erradicación de diferentes especies invasoras en diversos hábitats y localizaciones geográficas, financiado con cargo a los Fondos Next Generation EU entre 2022 y 2025. Además, estas reservas de lagartijas contribuyen a los Programas de Reverdecer Urbano de la Estrategia Europea de Biodiversidad 2030, añadiendo a los jardines y parques un valor adicional en la conservación de la naturaleza.
Paralelamente, el Ayuntamiento de Sant Josep se ha sumado a la protección de la lagartija pitiusa, llevando a cabo otras actuaciones. Una de ellas es la colaboración con la Sociedad de Cazadores de Sant Josep para la instalación de trampas para serpientes en varios puntos del municipio y la distribución de estas trampas a la ciudadanía en los últimos años. Asimismo, se mantiene contacto con algunas de las entidades que han unido esfuerzos para proteger a la lagartija de las Pitiusas, como las iniciativas Sargantanes o Serps, SOS Salvem sa Sargantana Pitiüsa o Protegim ses sargantanes.