El partido político Podemos ha arremetido esta mañana contra el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, calificando de «vergonzosas» sus declaraciones en las que se refería a la llegada de menores migrantes en patera como una «invasión» a las costas de Ibiza y Formentera.
En un comunicado emitido esta mañana, la representante de Podemos Ibiza, Mònica Fernández, acusa a Marí de «adoptar el discurso de la extrema derecha en materia de migración e instrumentalizar la llegada de pateras para sus intereses partidistas, igual que hizo el otro día Pedro Sánchez».
Fernández se muestra sorprendida ante el hecho de que «PSOE, PP y Vox compartan diagnóstico y soluciones en tema migratorio», citando la aprobación conjunta del Pacto de Migraciones a nivel europeo y las posiciones sobre las devoluciones en caliente y la posición sobre las fronteras de la Unión Europea.
Podemos rechaza el uso del término «invasión», al que califica como «un término de extrema derecha que es profundamente racista y que es totalmente indecente que pronuncie el presidente del Consell de Ibiza».
Además, critica que mientras se habla de invasión por la llegada de migrantes en patera, «las Islas pulverizan el récord de presión humana con un turista por cada dos habitantes».
Fernández cuestionó: «¿Cuánto presupuesto del Consell de Ibiza va dedicado a paliar los efectos de la invasión de turistas sobre nuestra isla? ¿Cuánto nos cuesta a los ibicencos e ibicencas simplemente vivir en esta isla tan solo por los costes del turismo? ¿Cuánto sufre nuestro territorio por la presión de los más de veinte millones de turistas que llegan cada año a Baleares? ¿Qué va a hacer el señor Marí para solucionar la crisis habitacional, que es la otra cara de la masificación turística? ¿Dónde ha estado Vicent Marí mientras se dejaba en la calle a las familias de Can Rova?».
Desde Podemos exigen a Vicent Marí que «no se excuse tras discursos de extrema derecha» y que no «azuce el odio contra niños y niñas que se ven obligados a migrar solos en las peores condiciones para no hacer su trabajo como presidente del Consell». Fernández califica de «deleznable» la actitud del presidente y la define como «racismo institucional».
La representante también resalta que «una patera, como señala la última campaña de CEAR, es el último recurso para quienes lo han perdido todo, un billete sin garantía de llegada, un síntoma de la falta de vías legales y seguras y de voluntad política».
Subraya que «los menores que migran solos y las personas migrantes deben ser tratadas con las máximas garantías y el respeto a los derechos humanos, esa debería ser la responsabilidad de cualquier representante público y de todas las administraciones a todos los niveles».
Finalmente, Fernández insta al presidente del Consell: «Dejen de señalar a menores indefensos para tratar de tapar las vergüenzas de su ineptitud política».