@Noudiari / Podemos Eivissa ha mostrado su «más enérgico rechazo» a la postura de ANEVAL (Asociación Nacional Empresarial de Vehículos de Alquiler) que se ha negado a pagar el impuesto de circulación en los municipios de las Balears, «pese a que desarrollan su actividad aquí y obtienen su beneficio aquí», afirman desde la formación ibicenca en una nota.
Según explica Podemos Eivissa, ANEVAL se niega a pagar sus impuesto en Baleares porque afirman que atenta contra «su esencia y modelo de negocio». Un modelo que a la formación morada le parece «más propio de unas aves de rapiña que depredan un territorio y se largan sin dejar nada a cambio».
Desde Podemos Eivissa afirman que comparten plenamente la PNL que aprobó el Parlament Balear el pasado 25 de noviembre, en la que se reclama a las empresas de alquiler de coches que paguen el impuesto de circulación en las islas, y así evitar la llamada “deslocalización de vehículos”.
«Matricular los coches en otras provincias donde el impuesto de circulación es más bajo, y luego trasladar los coches a Ibiza para hacer negocio es una triquiñuela legal, pero que nos indica cuales son los valores y los principios de estas grandes empresas. La esencia a la que se refiere ANEVAL es la de las aves de rapiña porque su modelo de negocio se basa en la misma lógica: sacar beneficio rápido, sin miramientos y a otra cosa. Estas multinacionales esquilman las islas y obtienen sus ganancias causando un gran impacto en una isla pequeña y frágil como Ibiza, sin que les importe lo más mínimo», exponen.
Podemos Eivissa acusa a estas empresas de abandonar las islas en invierno y en verano colapsar las carreteras con el incremento en contaminación y accidentes, «alteran el mercado de los rent a car insulares y les reducen el margen de beneficio, que al tratarse de pequeñas y medianas empresas autóctonas no pueden competir con esos precios. Esto provoca que las pequeñas empresas que sí pagan el impuesto de circulación en las islas, que sí dejan beneficio económico en éstas, se vean gravemente afectadas y expulsadas de manera progresiva del mercado».
Además, señalan que el hecho de que estas grandes casas de alquiler no matriculen los vehículos en las islas, impide que las instituciones baleares lleven a cabo un recuento de las flotas de vehículos, «lo que conlleva mayor descontrol y mayor masificación de las carreteras insulares», explican.