EFE / La consellera de Salud, Patricia Gómez, ha asegurado este viernes que sería partidaria de prolongar la prohibición de fumar en las terrazas cuando acabe la pandemia, pero ha señalado que, sin causa sanitaria extraordinaria, la ley ampara el consumo de tabaco al aire libre.
«Ojalá tuviéramos la normativa», ha señalado Gómez al ser preguntada sobre la extensión del veto al tabaco en las terrazas con ocasión de la presentación de la campaña de su departamento de cara a la celebración el 31 de mayo del Día Mundial Sin Tabaco,
La consellera ha comparecido en rueda de prensa junto a la directora general de Salud Pública, Maria Antònia Font, quien ha indicado que esta misma limitación para impedir fumar en espacios al aire libre de la hostelería rige respecto a las playas.
El Govern confía en que este año se adhieran nuevos municipios a la campaña de playas sin humo, que cuenta con doce arenales incorporados.
Esta iniciativa que tiene carácter didáctico porque ni los ayuntamientos ni el Govern pueden sancionar a quien fume en playas aunque haya carteles que desaconsejen hacerlo. «Es una recomendación», ha admitido Gómez.
La consellera ha afirmado que el tabaco está detrás del 38 % de las muertes de hombres y del 25 % de las de las mujeres porque provoca cánceres y enfermedades cardiovasculares, por lo que representa «un reto muy importante para el sistema sanitario».
Ha recordado que desde el 1 de enero del año pasado la sanidad pública financia dos fármacos para dejar de fumar vareniclina y bupropión, que han sido prescritos en las islas a 6.680 fumadores de los que 1.457 completaron el tratamiento.
Asimismo, la Conselleria de Salud sigue llevando a cabo programas de formación en centros educativos para tratar de evitar que los adolescentes se introduzcan en el consumo del tabaco.
La directora general de Salud Pública ha indicado que, según los últimos estudios, el 46,3 % de la población de Baleares fuma, con mayor incidencia entre los hombres (49,6 %) que entre las mujeres (43,2 %).
En la población de 12 a 18 años, la tendencia por sexos se invierte: fuman el 41,4 % de las chicas y el 29,5 % de los chicos, según los datos expuestos por Font.
Además, ha puntualizado, en muchos casos, fumar se asocia al consumo de cannabis en la población más joven, entre la que también se ha consolidado el uso de cigarrillos electrónicos.
La directora general ha hecho hincapié en la importancia de que todas las administraciones y las entidades sociales ligadas a la salud se involucren en la lucha contra el tabaco mediante actuaciones comunes y cada una en su ámbito de competencia.
A las instituciones públicas les corresponde «ser contundentes y hacer que la ley se cumpla» para proteger a los no fumadores, así como ofrecer a los fumadores ayudas efectivas para que superen su adicción, ha resaltado.