@C. Vidal / El pleno del Ayuntamiento de Sant Antoni, con los votos a favor del PP y en contra del PSOE-Pacte y Nou Partit, aprobó este jueves la nueva ordenanza de ruidos y vibraciones tras haber rechazado previamente todas las alegaciones presentadas por los empresarios del West End. Esta nueva norma permite adoptar medidas cautelares antes incluso de que se inicie el expediente sancionador e imponer multas a los infractores que van desde los 750 euros, las faltas leves, hasta los 3.000 euros, las más graves.
“Sólo se han aceptado tres alegaciones, dos de la Asociación Balear de Constructores y otra de un particular de Sant Antoni. Todas las peticiones presentadas por los empresarios del West End, que han sido muchas, han sido rechazadas por temas jurídicos que no tenían ni pies ni cabeza. Es un sector con mucho peso dentro del municipio y es lógico que siempre que haya alguna modificación protesten. Pero si hemos llevado a cabo esta modificación es porque la ley nos obligaba a hacerlo antes del 30 de junio y, además, esta ordenanza tiene un carácter tan técnico que apenas influyen los criterios políticos”, afirmó Xicu Cardona, concejal de Governació y Protecció Civil.
Las críticas de sus contrincantes políticos no se hicieron esperar. “Esta ordenanza ya viene viciada desde el principio y no se está cumpliendo. Lo único que hace es permitir que pueda ocurrir cualquier cosa alrededor de Sant Antoni y, por ejemplo, yo ya veo una discoteca al lado del campo de fútbol. En definitiva, la ordenanza aplica el todo vale y eso no es de recibo”, argumentó el socialista Pep Marí, Marge.
Junto a la aprobación definitiva de la nueva ordenanza de ruidos y vibraciones, también se dio luz verde a la aprobación provisional de la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana, así como el establecimiento y la prestación del servicio público de la escoleta de Can Coix.
Para la próxima sesión plenaria, está previsto que se trate otro tema también polémico como es la ordenanza sobre horarios, en el que también se prevén complicaciones y que, actualmente, todavía está en proceso de estudiar las alegaciones.
Facturas
Otro de los temas estrella del pleno fue el de las facturas. El punto 2.4 del orden del día fue el reconocimiento extrajudicial de crédito, que ascendía a una cantidad de unos 521.000 euros. “Son gastos ya realizados que no tenían un informe favorable de actuación y que no estaban incluidos en los presupuestos de 2012”, declaró Vicent Ribas, concejal de Hisenda y Turisme.
Este punto provocó un cruce de acusaciones entre Ribas y el diputado del PSOE-Pacte José Antonio Fuentes. “Usted dice que son gastos necesarios pero, por ejemplo, nos encontramos con la rotulación de cuatro bicicletas que nos costó 944 euros. No lo veo tan necesario y me parece muy caro. Además, hacen ustedes pequeñas trampas con el presupuesto, porque podían haber previsto muchos de esos gastos el año pasado y, sin embargo, ahora los cargan al presupuesto de 2013. Esto indica muy mala gestión por su parte”, aseguró Fuentes.
La alcaldesa, Pepita Gutiérrez, zanjó el asunto: “No se puede decir que hacemos trampas. Aquí no hay ningún capricho ni nada raro en las facturas, que son todas justificadas y ya están pagadas y bien pagadas”. El PP votó a favor de la aprobación del reconocimiento del crédito, mientras que el PSOE-Pacte votó en contra y Es Nou Partit se abstuvo, aunque con la recomendación de “intentar utilizar este tipo de mecanismos, que son demasiado habituales, lo menos posible”.
Presupuestos
El equipo de gobierno pudo sacar pecho en la parte de control, concretamente en la liquidación de los presupuestos de 2012 con un superávit de 6.937.289 euros. “Hemos cerrado 2012 con un remanente de tesorería de gasto general de 9,1 millones de euros y esos 6,9 millones de libre disposición lo que, teniendo en cuenta los tiempos que corren, son datos muy positivos. La deuda viva del Ayuntamiento, a fecha de 31 de diciembre de 2012, es de 13,9 millones, con una ratio de 56,38 de endeudamiento, que es más bajo del que pide la legislación, que es de un 75 por ciento. Eso nos permite tener margen para hacer inversiones y demuestra que se están haciendo las cosas bien en el tema económico”, añadió Ribas.
Por último, en el informe trimestral de morosidad de 2013, el concejal de Hisenda y Turisme destacó el menor endeudamiento del Ayuntamiento, con un importe de facturas pendientes de pagar que asciende a un millón de euros. En 2012, por estas fechas, se debía algo más de cinco millones, por lo que la situación “está mejorando considerablemente”.
Rifirrafe final
La sesión, eso sí, no se cerró sin un pequeño rifirrafe, el protagonizado por la socialista Silvia Limones y la alcaldesa. Limones afirmó en el turno de pliegos y preguntas que “sé que sois maravillosos y nosotros no, pero lo que no se puede permitir es la actitud de prepotencia y desprecio que tienen, riéndose en varias ocasiones de algunos de nuestros compañeros”. Pepita Gutiérrez respondió tajante que “por mi cargo no puedo contestar, pero no le admito estas palabras y su actitud deja mucho que desear».