@Noudiari / Sos Refugiados Ibiza y más de 40 organizaciones españolas especializadas en la defensa de los Derechos Humanos se suman al llamamiento de la Asociación Marroquí por los Derechos Humanos y otras organizaciones marroquíes para denunciar los arrestos, deportaciones e incluso muertes de migrantes que se están produciendo estos días tras la promesa de fondos para controlar la migración formulada desde la Unión Europea.
Denuncian enérgicamente los atentados contra la vida, la dignidad y los Derechos Humanos tanto de la población marroquí como de las personas migrantes que atraviesan Marruecos, donde son sistemáticamente maltratadas, violadas, fruto de trata y comercio de personas e incluso impunemente asesinadas.
De hecho, alrededor de 1800 personas han sido arrestadas en la última semana en redadas llevadas a cabo con equipos pesados antidisturbios y helicópteros. Estas actuaciones violentas de las fuerzas de seguridad, alejadas de las leyes y convenios internacionales del Reino de Marruecos, han culminado con la reciente muerte de dos jóvenes -entre ellos un menor- durante las redadas en el norte de Marruecos, en una campaña generalizada de irrupción por la fuerza en hogares de migrantes y locales de las organizaciones de Derechos Humanos, desmantelamiento violento de los campamentos, detenciones arbitrarias, así como expulsiones y movilizaciones forzosas y colectivas hacia desiertos del este y el sur del país.
Por todo ello, las organizaciones civiles de defensa de Derechos Humanos condenan la extrema violencia ejercida sobre personas migrantes subsaharianas por las fuerzas de seguridad marroquíes y exigen al gobierno marroquí que respete plenamente sus compromisos internacionales en materia de garantía de los Derechos Humanos Fundamentales, el fin de las redadas abusivas y de las deportaciones, la investigación de las denuncias de uso excesivo de la fuerza por parte de su policía y de la muerte de dos jóvenes subsaharianos, la despenalización de la migración irregular, derechos en materia de sanidad, educación y otros servicios básicos para la población migrante y familias, así como campañas de sensibilización contra el racismo y la xenofobia hacia estas personas.
Además, instan al Estado alauita a establecer un Sistema Nacional de Asilo y Refugio, y a la Unión Europea a velar por el cumplimiento de los Derechos Humanos en los países a los que se otorgan medios para mejorar las condiciones de vida de las personas migrantes, y no para que, precisamente, se vulneren sus Derechos Humanos.