@Noudiari / Eliminar por completo las barreras arquitectónicas en los diferentes pueblos de Eivissa debería ser una prioridad para los diferentes ayuntamientos. Sin embargo, las personas con alguna discapacidad o con movilidad reducida deben pelear a diario con aceras demasiado altas, con farolas en medio de las vías para peatones y con el incivismo del resto de ciudadanos. La última muestra fue el pasado domingo, cuando una hombre con movilidad reducida se vio obligado a circular con su scooter entre el tráfico en Santa Eulària, tras toparse con un bordillo demasiado alto en un paso de peatones en la esquina de la calle José Guasch Vich con Sant Jaume. Un problema que el Consistorio debería atajar con celeridad para que no vuelva a suceder.
No es por nada, Pero ese paso de cebra está adaptado así que no entiendo para nada esa maniobra y el oportuno cámara. Paso por ese paso de peatones cada día.