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— Mia Smith (@mmiassmith) July 17, 2019
@Noudiari / La malloquina zona turística de Magaluf es hoy trending topic con más de 9.000 tuits debido a la carta que publica una joven británica culpando a la altura de los balcones de los hoteles españoles de la muerte de su novio el mes pasado en dicha zona de Mallorca, una de las más conflictivas de la isla vecina.
Freddie, el novio de esta chica, es una de las últimas víctimas mortales del balconing de este verano. Pero a la joven no han tardado en caerle multitud de críticas sobre sus declaraciones que se han hecho virales, considerando que la culpa de muertes por balconing se debe a borracheras y consumo de drogas.
Mia Smith asegura que su novio “no estaba haciendo ninguna locura como ‘balconing’, sino que simplemente salió al balcón tras salir por la noche y se cayó”. Smith se muestra sorprendida de que en los últimos dos meses se hayan producido otras cuatro muertes de personas que cayeron desde un balcón durante sus vacaciones.
“Esto pasa en todo el mundo, sin embargo la mayoría de los accidentes se localizan en España y en las islas españolas”, dice Smith, que critica la poca altura de las barandillas de los balcones, “aproximadamente a la altura de la cintura”, algo que considera “una altura que está esperando accidentes”.
Mia se muestra sorprendida por “la falta de conciencia” sobre lo que considera una “chocante” falta de seguridad en los balcones. Y añade: “Si hubiera escuchado sobre los incontables accidentes por caídas desde balcones antes de que mi novio fuera a Magaluf, me habría asegurado de que cerrara su terraza y no saliera al balcón después de beber”.
La joven culpa a los hoteles de Magaluf de “ganar dinero a costa de emborrachar a los turistas” y critica que no pongan medidas de seguridad extra sabiendo que “se van a emborrachar” y que puede haber accidentes.
“Muchos hoteles viven este tipo de accidentes y no hacen nada para cambiar la altura de los balcones o cerrarles las terrazas”, agrega la chica, que pide aconsejar a quienes se vayan de vacaciones “que tengan mucho cuidado, incluso si están sobrios”.
Viven como natural estar borrachos, por lo tanto, la culpa no es suya sino del mundo, que no está adaptado a su borrachera
Unos pocos se caen y a los demas los tiran