La Policía Local de Sant Josep denunció anoche a una conductora que provocó un accidente y arrojó una tasa de alcohol de 0,57 miligramos por litro en aire aspirado, duplicando el límite de alcoholemia establecido en 0,25 mg/l.
La conductora se saltó un stop cuando circulaba por Sant Jordi y chocó contra una furgoneta. Afortunadamente no hubo que lamentar heridos de gravedad. La conductora del Peugeot tendrá que responder penalmente en los juzgados de Ibiza por la comisión de un delito contra la seguridad vial y por lesiones leves causadas al ocupante del vehículo contrario, además tendrá que responder civilmente por los daños generados.
«Los peores pasajeros que puede transportar un conductor son el alcohol y las drogas», recuerdan desde sus redes sociales la Policía de Sant Josep.