EFE / Seis personas -cuatro en Mallorca, uno en Ibiza y otro en Formentera- se han visto afectadas por golpes de calor en las Islas Baleares desde el pasado 1 de junio, ha informado la Conselleria de Salud.
La mayoría de los afectados forman parte de los colectivos de riesgo: tres son hombres que estuvieron expuestos al ambiente caluroso por motivos laborales y dos son mujeres de 65 años o más.
Cinco de los afectados fueron atendidos en los hospitales públicos otro en el centro de salud Escola Graduada de Palma.
Los datos de enfermos por golpes de calor son de notificación obligatoria y son recogidas por el Servicio de Epidemiología.
Estos datos se registran en los meses en que habitualmente se produce un nivel elevado de las temperaturas, concretamente del 1 de junio al 15 de septiembre.
El golpe de calor es una situación que puede ser grave. La temperatura corporal alcanza los 40 °C y el cuerpo no puede reducirla de manera eficaz. Es causado por la permanencia prolongada en ambientes muy calurosos o por hacer una actividad física intensa cuando hace mucho calor.
Las personas que tienen más riesgo de ser afectadas por un golpe de calor son los mayores de 65 años, más aún si viven solas o son dependientes, los bebés y los niños pequeños, las personas con dolencias crónicas que toman determinadas medicaciones, los trabajadores en ambientes calurosos, y las personas que hacen ejercicio físico intenso en las horas de más calor.
Se reconoce por la aparición de síntomas como una temperatura muy elevada, piel enrojecida, caliente y seca, pulso acelerado y respiración rápida, rampas, dolor de cabeza, náuseas y vómitos, somnolencia y mucha sed.
También puede haber confusión, convulsiones y pérdida de conocimiento que, a veces, es el primer síntoma en las personas mayores.