Filmados por Neus Prats (GEN-GOB).
Una de las vecinas que paseaba ayer por Caló de s’Oli era precisamente la portavoz de la entidad ecologista GEN-GOB (Grup d’Estudis de la Natura / Grup Balear d’Ornitologia), Neus Prats, quien denuncia que esta situación es consecuencia de haber edificado mucho «sin infraestructuras o con infraestructuras infradimensionadas»: «Tenemos un alcantarillado tercermundista, sin separación de pluviales y gente incívica que utiliza el váter como un vertedero de todo tipo de restos», añade Prats, que denuncia, también, que el presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Marí, «en vez de hablar de arreglar este desastre, habla solo de crecimiento». Prats lamenta que este tipo de urbanismo es el que rige en el resto del municipio de Sant Josep de sa Talaia.
«Esto es lo que pasa cuando llueve, cuando no llueve pasa a un emisario que hay debajo del agua», agrega la portavoz del GEN, que no duda en referirse a todo esto como una de las consecuencias del «urbanismo salvaje». Asimismo, Neus Prats, que pudo realizar la siguiente fotografía en la zona del vertido, subraya que «los efectos de la eutrofización [exceso de nutrientes en el agua] en la costa demuestran que este no es un problema puntual».
La explicación del Ayuntamiento
Desde el Ayuntamiento de Sant Josep señalan que hay una «conducción que pasa de forma paralela a la red de saneamiento y que en determinados puntos también está comunicada con la red de pluviales, por lo que en momentos puntuales, como el de ayer, rebosa», debido a las intensas lluvias. Fuentes municipales exponen a Noudiari que efectivamente esta es «una de las deficiencias de la red» y que ocurre a menudo, pero que a estas horas las tapas de las alcantarillas ya han sido cerradas por operarios de la concesionaria de saneamiento, que hoy han procedido, además, a limpiar la zona afectada. De todos modos, reiteran que el detonante de este vertido no ha sido, como en otras ocasiones, un tapón formado por toallitas húmedas, sino las precipitaciones de los últimos días.
El Consistorio subraya que aunque se van haciendo algunas acciones de mejora, la solución para poner fin a largo plazo a este tipo de situaciones pasa por la reforma prevista de la Bahía de Portmany, proyecto tras el que las pluviales quedarán totalmente separadas.
Y nuestros politicos.sentados en sus despachos
Se soluciona el tema prohibiendo las toallitas que no sean biodegradables pero hay que guardar el bolsillo del capitalista de turno
¿Cuando, va a aprender la gente ,que las toallitas no se arrojan por el wc?? Y lo peor de todo,en los paquetes de estas, se venden como biodegradables,cuando,no lo son. Echar toallitas al wc,me parece de autentic@ Picapiedra.
Cierto. La información que viene en los paquetes es totalmente errónea.