@LauraFArambarri / Con el tema militar estoy en ese punto tan criticado hoy en día que se llama equidistancia. Soy pacifista, pero al mismo tiempo valoro una parte del trabajo que hace el Ejército, como es el apoyo a los barcos pesqueros españoles en la peligrosa costa de Somalia o las labores de refuerzo que hacen en casos extremos. No puedo olvidar el extraordinario trabajo que hizo la UME (Unidad Militar de Emergencias) en Ibiza para sofocar el incendio de Morna en 2011.
Dicho esto, creo que el contacto con las armas debe estar alejado de la infancia. La imagen de niños y niñas empuñando armas tras las maniobras militares en Platja d’en Bossa dan escalofríos. Recuerdan a los niños soldados, recuerdan a las (olvidadas) recomendaciones pedagógicas de no regalar juguetes bélicos a los niños. Unos juguetes, además, que tienden a caer en el sexismo porque mayoritariamente se regalan a los niños y no a las niñas.
Criticar esas imágenes parece naïf en unos tiempos donde miles (millones en todo el mundo) de niños se pasan las tardes enganchados al Fortnite: horas y horas disparando y matando en ese mundo virtual.
Una cosa es que una familia elija en su tiempo libre acudir a unas maniobras militares o ir a visitar un portaaviones. Otra muy diferente es proponer esa visita como actividad escolar.</span>
Puede que sea naïf, pero quiero matizar un aspecto importante: Las madres y los padres que se han negado a que sus hijos e hijas acudiesen ayer a las maniobras militares en Platja d’en Bossa durante su horario escolar han sido una minoría y se han sentido como bichos raros y, con ello, sus hijos también se han sentido como bichos raros. Es decir, una cosa es que una familia elija en su tiempo libre acudir a unas maniobras militares o ir a visitar un portaaviones. Otra muy diferente es proponer esa visita como actividad escolar.
Y es que ayer cientos de escolares de la isla acudieron a las maniobras militares de la Infantería de Marina en Platja d’en Bossa. Algunos de ellos acabaron con cascos de soldado y apuntando por la mirilla de unos fusiles reales dentro de su horario escolar. Unas imágenes que están recibiendo duras críticas por parte de un sector de la comunidad educativa y de ciudadanos de todo tipo. Y yo creo que con razón.
Estados Unidos, posiblemente el país que más ha gastado en armas en toda la historia, es, a la vez, el lugar donde se acuñó el lema Haz el amor, no la guerra, entre los opositores al conflicto en Vietnam que se llevó por delante a casi 60.000 jóvenes estadounidenses. La guerra no es un juego de niños.
Me parece legítimo que quiera inculcar en sus hijos un mundo de piruleta donde no existe la guerra ni la maldad pero menos mal que de Usted o de los suyos no depende la educación y que podemos elegir aunque gente de la ideología política que está de acuerdo con Ud. Quiere arrebatar esa libertad de poder educar en los valores que queremos a nuestros hijos para inculcar esa ideología izquierdista que en mi opinión es mucho más peligrosa. Forma parte del espíritu democrático el acercamiento del ejército al pueblo, también, por qué no, el valor de la defensa Nacional y protección de la soberanía del pueblo. Le recuerdo que el ejército es garante de la Constitución que permite tener las libertades y derechos que nos corresponde.
zzzzzzzzzzzzzz… (ronquido)
Totalmente de acuerdo con la articulista.