@Miguel Vidal / Lionel Messi no atraviesa su mejor momento, pero sigue estando considerado como el mejor futbolista de la actualidad y a rebufo de los éxitos deportivos con el mejor Barça de todos los tiempos, algunos historiadores le consideran incluso como el mejor futbolista de la historia, el más completo, por delante de Pelé, Di Stéfano, Maradona y Cruyff.
El azulgrana, además, añadió en la temporada 2011-2012 una muesca muy difícil de igualar a su impresionante palmarés individual: es el que más goles ha marcado en partidos oficiales en un año natural. Marcó 91 goles, batiendo de largo el récord que el alemán Gerd “Torpedo” Müller, otro depredador del área, había fijado en 1972 con 85 tantos.
Pero el récord de Messi, como el de su “alter ego” madridista Cristiano Ronaldo, el auténtico, el de mejor goleador de todos los tiempos, está aún por llegar. Es más, tanto a nivel global de partidos disputados, como de partidos y goles en Primera División, están aún lejos de poder conseguirlo, aunque su voracidad rematadora y su edad les hagan firmes candidatos a lograrlo por poco que las lesiones los respeten. La verdad es que tanto para Messi como para Ronaldo los grandes goleadores de la historia del fútbol les quedan todavía muy lejos. ¿Inalcanzables?.
Según la FIFA, el mayor goleador de Primera División es el brasileño Edson Arantes do Nascimento “Pelé” que de 1957 a 1977 jugó 560 partidos y marcó 541 goles con un promedio de 0.97 goles por partido. Le sigue el checo Josef Bican que jugó de 1931 a 1955, con el parón de la guerra mundial de por medio, 341 partidos y marcó 518 goles lo que hace que tenga el mejor promedio goleador de todos los tiempos: 1’51 goles por partido. El tercer máximo goleador en Primera División es el húngaro Ferenc Puskas que de 1943 a 1966 disputó 533 partidos y marcó 511 goles con un promedio de 0.96 goles por partido.
Esta lista de “monstruos” del gol continúa con Romario (612 partidos, 489 goles, 0’80 de promedio de 1985 a 2007), el también brasileño Roberto Dinamite (758 partidos, 470 goles, 0’62 de promedio de 1971 a 1992), el húngaro Schlosser (318 partidos, 417 goles, 1’31 de promedio de 1905 a 1928), el también húngaro Zsengéller (394 partidos, 416 goles, 1’06 de promedio de 1935 a 1952), el escocés McGrory (408 partidos, 410 goles, 1’00 de promedio de 1922 a 1938), el brasileño Zico (596 partidos, 406 goles, 0’68 de promedio de 1971 a 1994) y en décimo lugar, cerrando el espectacular “Top Ten”, el alemán Gerd “Torpedo” Muller que entre 1965 y 1981 jugó 507 partidos de Primera División con el Bayern Munich y marcó 405 goles, lo que hace un promedio por partido de 0.80 goles.
Leo Messi, de 2004 a nuestros días, lleva 266 partidos en Primera División y ha marcado 230 goles, lo que hace un promedio de 0’86 goles por partido. Tendrá que correr mucho “El Pulga” si quiere inscribir su nombre entre los “históricos” del gol. Incluso en ésta carrera le supera su gran adversario contemporáneo a ser elegido el mejor, el madridista Cristiano Ronaldo, que debutó en la máxima categoría en 2002 con el Sporting de Lisboa, con 17 años, y que ahora a sus 29 años lleva ya doce temporadas a pleno rendimiento, habiendo jugado a día de hoy 379 partidos en Primera División y ha marcado 257 goles, lo que hace un promedio de 0’67 goles por partido.