@Noudiari/ Me gusta presentarme como un “ibicenco del Atlas” aunque es una mentira piadosa porque los Atlas no llegan hasta Tetuán. Sería más adecuado decir que soy un ibicenco del Rif o un ibicenco de raíces marroquíes. Aunque el DNI afirma que soy español, mucha gente no se lo acaba de creer, especialmente los cuerpos y fuerzas de seguridad. ¿Historias? Las que queráis.
En una ocasión, hace tiempo, un tipo me pegó y la Guardia Civil, en vez de detenerle a él, me detuvo a mi. Lo normal, igual que la incredulidad del policía nacional cuando voy a renovar el DNI o sacarme el pasaporte. En una ocasión le dije a uno: «No lo mires tanto, que si no fuese obligatorio no lo llevaría». Por no decir la revisión que me hacen de las maletas cuando bajo de un barco: quizá esperar encontrar TNT o droga, pero sólo encuentran los calcetines sucios que he dejado adrede. Honestamente, no sé si en la academia les explican qué es un prejuicio o si estos cacheos son órdenes que vienen de arriba, como antes pasaba con los gitanos.
Una escena habitual. Estoy en la vía pública y sucede esto:
– A ver, tú, papeles.
– No tengo
– Dese la vuelta y ponga las manos sobre la pared. ¿Qué? Paseando, ¿no?
Me doy la vuelta, pongo las manos sobre la pared, empieza a registrarme bruscamente y encuentra cosas en mi bolsillo.
– Veamos que tenemos aquí.
Sólo saca mi DNI
– Pero esto que es?
– Un DNI
– ¿Pero usted no me ha entendido cuando le he pedido los papeles?
– Pero es que yo no tengo papeles, soy ciudadano español. ¿Qué quieres de mi?
Le da dos golpes con el dedo mientras los mira, me lo devuelve, dice «buenas noches» y se va. Se va sereno, tranquilo y altivo pero no se ha dado cuenta de que al DNI le falta una esquina, que está caducado desde Agosto y que tiene el chip pegado con pegamento. Me gusta Ispania.
Jajajajaja
Jajajjajaajjaja.
y el congreso lleno de delincuentes patriotas…