Por los adjudicatarios de elementos náuticos de Sant Josep
La totalidad de los adjudicatarios de elementos náuticos a motor en el municipio de Sant Josep quiere dejar constancia de su disconformidad ante lo que considera una licitación contraria a los intereses públicos y, especialmente, de los vecinos y usuarios de las playas de Sant Josep.
Todos tenemos derecho a equivocarnos y aceptamos que la administración no sólo tenga el derecho, sino también la costumbre de hacerlo. Pero lo que no se entiende es que el error se repita año tras año y que, ni siquiera efectuando alegaciones fundadas y dentro de plazo, el Ayuntamiento se digne a estudiarlas como corresponde y a rectificar sus errores, ni siquiera los más evidentes.
Cuando todos los profesionales de un sector de reúnen y presentan conjuntamente un escrito de alegaciones, lo más sensato es escuchar sus quejas e intentar darles una respuesta suficientemente motivada. Entre todos suman centenares de años de trabajo diario en las playas del municipio, así que algo sabrán. En este caso, además, ni siquiera hacía falta ser un experto en playas para percatarse de lo razonable de las demandas del sector, simplemente, tener voluntad de escuchar y de resolver los problemas.
El primer y principal bloque de quejas de los adjudicatarios de elementos náuticos iba en el sentido de reconocer que para su actividad es necesaria más experiencia que para explotar hamacas. Que si para licitar a un lote de hamacas se requiere una experiencia mínima de quince meses, ¿no sería razonable exigir una experiencia de años para dirigir una escuela de esquí o de embarcaciones a motor? ¿Realmente para el Ayuntamiento de Sant Josep es aconsejable la misma experiencia para llevar una escuela de esquí que un lote de hamacas, independientemente de los títulos que se necesiten para ello? Vista su respuesta, es evidente que sí. No sólo no han rectificado sus pliegos, sino que ahora los interpretarán en el sentido que la experiencia como camarero de un quiosco sirve para licitar para un lote de esquí-bus o alquiler de embarcaciones a motor. Parece una manifiesta arbitrariedad. No tiene ningún fundamento.
También se pidió alguna explicación a la desaparición de algunos lotes en algunas de las playas, en concreto, Cala Bassa, Platges de Comte y Platja d’en Bossa. En este caso, no era tanto una queja por la decisión, si no por el hecho de que se tomara a espalda de los afectados y sin ofrecerse ninguna explicación. Por ello, la alegación se encabezaba aludiendo a los principio de transparencia y publicidad que deben inspirar toda contratación y actuación administrativa. El Ayuntamiento se ha desentendido de dicha reclamación, alegando que es competencia exclusiva del Estado y la Comunidad Autónoma, como si el municipio no tuviera nada que decir o informar al respecto, contraviniendo lo regulado en el artículo 115 de la Ley de Costas.
Por último, las tarifas a aplicar a los servicios también parecen de un manifiesto sinsentido, como cuando se tarifa el esquí náutico en tramos de media hora, completamente irreales. Tampoco dicha razonable queja ha sido atendida, aludiendo a que no ha habido variaciones respecto a años anteriores, sin que se hubiera dado problema alguno, como si un error reiterado dejara por ello de ser un error.
Por todo ello, los adjudicatarios de elementos náuticos a motor de las playas de Sant Josep quieren manifestar públicamente su desencanto con la actuación municipal que, lejos de intentar ofrecer mejores servicios a los usuarios de las playas, mejorando las prestaciones y la calidad de las explotaciones náuticas, continua haciendo prevalecer la importancia de las ofertas económicas, metiendo en el mismo saco actividades tan distintas como la de alquilar hamacas o embarcaciones a motor o escuelas de esquí, desaprovechando la oportunidad de dialogar con todos los profesionales del sector para mejorar la seguridad y protección medioambiental en las playas del municipio.
Los adjudicatarios siguen abiertos al diálogo con los representantes municipales para mejorar próximas licitaciones en defensa de los intereses de todos lo usuarios y vecinos de las playas del municipio.
Los pliegos redactados, el procedimiento seguido y en general la óptica con la que se ha planteado el procedimiento de adjudicación sólo puede definirse como una auténtica chapuza! Y ya van dos.. la famosa subasta y ahora esto..!